Me cuesta escribir, y mucho más, publicar.
¿Qué valor pueden tener mis reflexiones? Son una visión inacabada, sesgada, subjetiva. Están completamente atravesadas por mi vivencia y por mi mirada sobre las fuentes teóricas.
Mi mi mi. Yo yo yo.
Hace un tiempo Feña Ortalli, (creador y editor de la revista Status, única publicación existente en materia de IMPRO) me dijo que escribir no es un acto de arrogancia. No se publica por creer que se tiene la verdad, sino por compartir los hallazgos, errores, dudas, aciertos, de manera que sirvan de inspiración a otras personas. Aunque más no sea para refutarlas.
Aportar lo que se tiene. Sopa de martillo.
Pienso en lo que aprendo cuando leo. En todo lo que me hacen pensar publicaciones con las que no estoy de acuerdo. En lo que me inspiran y revitalizan lo aportes de tantísimas personas que quizás nunca conozca personalmente.
No se trata sólo de mí. Escribir es la intención en acción concreta de construir un puente.
Allá voy…
Patricia Davis
Llevo más de 25 años trabajando con grupos, focalizada en el desarrollo tanto a nivel personal como grupal y comunitario.